Si tenés dos minutos, ésta es la información precisa para vos:
- Existen siete tipos de desinformación y se clasifican en un orden de menor a mayor intención de generar daño o engañar, según la profesora y especialista en desinformación Claire Wardle. Estos contenidos son divulgados por candidatos, autoridades, cuentas pseudoinformativas, medios, militantes partidarios y trolls.
- Las desinformaciones son difundidas a través de aplicaciones de mensajería, redes sociales, medios de comunicación establecidos o cuentas pseudoinformativas que adoptan la apariencia de medios.
- A menos de 20 días de las elecciones generales de Paraguay, pudimos identificar cinco tipos de desinformaciones que se repiten. Las más graves y peligrosas son aquellas que manipulan contenidos reales o que contienen información 100% falsa.
Si tenés unos minutos más, te invitamos a leer el artículo completo:
Según Claire Wardle, profesora y especialista en desinformación, existen siete tipos de desinformación: la sátira o parodia, la falsa conexión, contenido engañoso, falso contexto, contenido impostor, contenido manipulado y contenido fabricado. Esta clasificación está hecha según el grado de intención para hacer daño o engañar.
Los tres últimos tipos de desinformación son los más peligrosos porque alteran contenidos reales o utilizan la línea gráfica de fuentes confiables para engañar.
A partir de esta clasificación y el monitoreo de medios de comunicación, apps de mensajería y redes sociales, identificamos diferentes ejemplos de cinco tipos de desinformación que se han divulgado en estas elecciones.
Contenido engañoso:
Es contenido que no refleja con rigor los hechos. Usa fragmentos de citas para respaldar un punto más amplio, cita estadísticas de forma selectiva u omite información.
En marzo de este año, el candidato a presidente por la ANR, Santiago Peña, habló de su propuesta de campaña “Chau Chespi”. En su video promocional, afirmó que 80% de los asaltos, robos y aprietes son cometidos por “chespis”. Según su equipo de prensa, el dato está basado en declaraciones del ministro del Interior, pero el ministro no proveyó las estadísticas que respaldan su afirmación. En este caso, Peña utilizó de forma selectiva un dato que no tiene fuente estadística accesible para respaldar su propuesta de campaña. Podés leer el factcheck aquí.
Falso contexto:
Este tipo de desinformación se da cuando un contenido que es genuino es reformulado de forma peligrosa. Un ejemplo reciente son las notas publicadas por La Nación y la cuenta En La Tecla en la que afirman que Infobae se posicionó a favor de Santiago Peña. Esto es falso. La nota se basa en un artículo de opinión firmado por Julian Obiglio, ex diputado nacional de Argentina, que expresa su apoyo a Santiago Peña. Una columna de opinión es un espacio personal y no refleja la posición editorial de un medio. El chequeo completo podés leerlo acá.
Contenido impostor:
Es contenido que suplanta fuentes genuinas, utiliza logotipos conocidos o noticias de figuras o periodistas establecidos para generar la sensación de credibilidad y que la desinformación no sea identificada.
Un caso reciente se dió durante las elecciones internas simultáneas, cuando se divulgó resultados de bocas de urna con la línea gráfica de ABC Color. El medio salió al paso y desmintió la desinformación.
Contenido manipulado:
Es uno de los tipos de desinformación más peligrosos. Lo vemos en capturas de pantalla manipuladas, videos con audios fuera de contexto, fotografías editadas, etc. El contenido manipulado es aquel en el que se altera un aspecto del contenido genuino u original con el objetivo de engañar.
Hace algunas semanas, se divulgó una imagen de Soledad Núñez, candidata a la vicepresidencia por la Concertación, en una supuesta marcha LGBT. El contenido fue manipulado y por lo tanto es falso. Esta misma manipulación se dió con un video divulgado donde supuestamente el periodista Oscar Acosta le llama ladrón a Efraín Alegre. El video también es falso.
Contenido fabricado:
Es contenido 100% falso, hecho con el objetivo de engañar y hacer daño. La mayoría de las veces son imágenes o videos y tienen características de teorías conspirativas.
Los videos de la cuenta DespiertaPy coinciden con esta descripción. En ellos se asegura que existe un complot conocido como la «Operación AA» para derrocar a la ANR. La serie de videos expone supuestos patrones en hechos aleatorios y no tiene fuentes ni testigos que confirmen lo divulgado.
Para que las piezas sean más verosímiles, utiliza imágenes de noticias publicadas en medios de comunicación, como videos de actos oficiales donde estuvo Mario Abdo y registro documental de otros políticos.