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Niños y niñas cuentan en primera persona cómo estudian desde sus casas por la pandemia del coronavirus
El 16 de marzo de 2020, de un día para el otro, más de un millón de niños y niñas dejaron de ir a la escuela en Paraguay.
«Extraño ir a la escuela porque estoy todo el día encerrado en mi casa. Son muy largas las tareas.
Prefiero hacer en la escuela con mis profes y mis compañeros. Extraño compartir con ellos. Me siento aburrido en mi casa. Espero que pronto pueda volver»
Juan
Cuarto grado
No sabían que no podrían volver por el resto del año.
El 16 de abril, el ministro de Educación anunció que hasta fin de 2020 se suspenden las clases presenciales. Lo decidió sin consultarlo antes con docentes, ni con las familias, ni con los estudiantes.
Los más afectados, los alumnos y alumnas de educación primaria, son los que no tienen voz ni micrófono.
«Ese pequeño mundo de los niños se convirtió en todo menos algo normal», dice la psicóloga Maureen Montanía.
«Estoy haciendo mi tarea en casa y me gusta hacerla, pero quiero hacerla en mi escuela, extraño a mi profesora y a mis amigos. Quiero volver a la escuela, porque ahí te pueden enseñar, te pueden ayudar a cómo escribir, cómo leer…»
«También quiero volver por otra razón, para que pueda divertirme en el recreo y pueda almorzar bien»
Francisco
Estudiante de primaria
La pandemia impide salir, estar afuera con otros. Cosas que son importantes a cualquier edad, imprescindibles en la niñez.
«Si nosotros sentimos ansiedad y nos cuesta, ¿qué será de ellos?» se pregunta Montanía.
«La profe me manda la tarea y yo hago en casa con la ayuda de mi mamá, mi papá y de mi hermana. Pero más con mi hermana, porque mi mamá trabaja»
Sofía
Segundo grado.
Paz Ortiz es parte de un equipo de psicólogas que trabaja en consejos de crianza positiva en medio de la pandemia.
«Tener conversaciones con los niños, niñas y adolescentes, escucharles, preguntarles qué saben, qué sienten, qué les gustaría saber sobre la situación que estamos viviendo», son acciones importantes, dice Ortiz.
«En la cuarentena no da tanto gusto hacer la tarea, no sé por qué»
«Los papás a veces no tienen la paciencia para explicar todo los que tienen que explicar las maestras y los profesores. También que sentís que estás agobiada de tarea y no te podés concentrar»
Emma
Cuarto grado.
A los niños y niñas les puede ayudar expresar lo que sienten, con un dibujo, con un juego o con un cuento.
También es importante decirles la verdad de lo que está pasando.
«La profesora le envía a mi mamá la tarea por WhatsApp. Yo y mi mamá hacemos todo el día y a veces me canso, pero descanso un poco y después hago otra vez»
Matías
Segundo grado.
Ser un padre o una madre perfecta es imposible «y menos en situaciones de crisis»,dice Montanía. «Es normal cometer errores. Necesitamos ser más pacientes con niños y niñas. Más pacientes de lo que en “lo normal” se requiere».
Por ahora, Ángeles Ferreira, la docente que nos acercó los testimonios de alumnos, pide a las familias que presten sus celulares a sus hijos.
«Es el único medio que tiene un niño o una niña para comunicarse con sus amigos. Imaginate lo esencial que eso en nuestra vida».
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