Si tenés menos de un minuto:
Entre abril y junio de 2021, cuando los contagios por covid-19 rondaban los 3.000 casos y las muertes trepaban a 100 personas por día, médicos, médicas y familiares de pacientes hospitalizados denunciaban la falta de oxígeno en hospitales del país.
Y ese desabastecimiento fue reconocido por el propio Ministerio de Salud.
Si tenés cinco minutos:
El presidente Mario Abdo Benítez, en su penúltimo informe de gestión, se refirió al suministro de oxígeno en 2021. Afirmó lo siguiente: «En junio de 2021, cuando se registraban los picos de caso de covid-19, el consumo de oxígeno había aumentado hasta seis veces. Sin embargo, la provisión (de oxígeno) no se vio interrumpida. Al punto tal que todas las dependencias de salud contaron con este elemento vital». Esto es falso.
El propio ministro de Salud Julio Borba reconoció en ese mismo mes que la falta de oxígeno era «un gran dolor de cabeza», porque desde hacía al menos un mes (mayo) los hospitales estaban sufriendo desabastecimiento.
A pesar de que en abril el gobierno aseguró que cuatro empresas iniciaron la provisión de oxígeno a los hospitales del sistema público, llovían las denuncias de parte de familiares de pacientes y personal de salud. La falta de stock, además, comenzó a afectar a la salud privada, que también dependía de empresas proveedoras del Estado.
La necesidad de camas en terapia intensiva y oxígeno fue creciendo a mediados de mayo y se reportaron muertes por esta causa, como constan en denuncias en la prensa. Los problemas principales fueron de provisión y recarga de oxígeno.
De acuerdo a Every Breath Counts, una asociación que aboga por un mejor suministro de oxígeno en países de bajos y medianos ingresos, hasta el 15 de junio de 2021, Paraguay era el quinto país de América Latina con mayor demanda diaria de oxígeno, después de Brasil, Colombia, Argentina y Bolivia.
Demanda diaria (en metros cúbicos):
Brasil: 2.944.836
Colombia: 1.164.958
Argentina: 1.164.958
Bolivia: 125.868
Paraguay: 123.162
El 11 de junio, el Sindicato Nacional de Médicos (Sinamed) cuestionó al Ministerio de Salud por la falta de provisión de oxígeno a los centros de salud del interior del país. Expusieron que familias enteras fallecieron por esta causa y que los centros asistenciales se encontraban «sin elementos con qué trabajar”.
Ya a mediados de junio de 2021, la discordancia entre las denuncias de las familias y el discurso oficial del gobierno paraguayo atrajo la atención de la prensa internacional. La incapacidad de responder a la alta demanda de los centros sanitarios hizo que el gobierno tuviera que solicitar envíos de oxígeno a Brasil.
Tal fue la falta de oxígeno que el 22 de junio no se pudo habilitar el pabellón de contingencia el Hospital de Caazapá por esta razón.
Médicos, médicas y familiares de pacientes graves de covid-19 tuvieron que gestionar recursos para dar respuesta a la alta demanda. Se apeló a la solidaridad de la ciudadanía, como en el caso de Itacurubí respira, la maratón para adquirir oxígeno que organizó la propia gente.