Un soberbio senador oficialista, Basilio “Bachi” Núñez, se dirigió a las cámaras y aseguró que no serían más de cien los estudiantes movilizados. Se refería a las protestas de universitarios en contra de la decisión del gobierno de promover la ley Hambre Cero, un proyecto que elimina el Fonacide y reorienta sus recursos para financiar la política de alimentación escolar del presidente cartista Santiago Peña.

Parte de esos fondos cubrían el Arancel Cero, una política de acceso gratuito a la educación superior conquistada por el movimiento universitario en 2020, durante la pandemia. Con la eliminación del Fonacide también quedaron sin garantía de financiación otros programas como becas para estudio en el exterior, programas de la ley de Salud Mental y el apoyo a investigaciones científicas. 

El presidente y varios referentes de su partido, la ANR, aseguran que la gratuidad en las universidades está garantizada con recursos del presupuesto nacional. Pero los estudiantes no confían en sus palabras y exigen la derogación de la ley Hambre Cero. Acusan de falta de diálogo y participación efectiva en el proceso de desmantelamiento del Fonacide. 

Tras una semana de movilizaciones, más de ocho facultades en toma y paros indefinidos en la UNA y universidades del interior, el presidente Peña viajó a Uruguay buscando inversión extranjera para el país, según sus dichos. Para los estudiantes, que son más de cien, el presidente huyó en medio de una crisis que su gobierno generó.

Votación con las linternas de los celulares en una asamblea estudiantil en el Campus de la UNA en San Lorenzo.

Estudiantes marchan sobre la avenida Mariscal López frente al Campus de la UNA en San Lorenzo.

«Che Santiago, che Santiago, te venimos a avisar, que sin el Arancel Cero que kilombo vamos a armar», corean los estudiantes en las diferentes tomas y movilizaciones.

Los estudiantes denunciaron hostigamiento y amedrentamiento de Policías que vigilan la toma de la UNA.

Los felinos del campus universitario acompañan las tomas.

El protagonismo no se lo llevan solo los michis, lo comparten con perritos que merodean el campus universitario.

Festejo de cumpleaños en la toma de la UNA.

En los carteles de las protestas son comunes los rostros de: Santiago Peña, Horacio Cartes y Basilio Núñez.

Un estudiante descansa frente a los carteles de las protestas por el Arancel Cero.

Docentes de la Facultad de Ciencias Sociales se reúnen frente a la toma en señal de apoyo a los estudiantes.

Contrario a lo que acusan políticos cartistas, los estudiantes hacen «vaquitas» y reciben víveres para resistir en las tomas.

El arte del remix en la protesta estudiantil.

Estudiantes de la Universidad Nacional del Este viajaron a Asunción para sumarse a las protestas. Los universitarios dijeron que no retrocederian hasta lograr el blindaje de la gratuidad.

A una semana de las protestas estudiantiles y el paro de la principal universidad pública del país, el presidente viajó a Uruguay para hablar de inversión extranjera.

Solo en la Universidad Nacional de Asunción, el Arancel Cero beneficia a 18 mil estudiantes de los cerca de 50 mil que asisten allí.

La ley de Arancel Cero garantiza la gratuidad en los cursos de ingreso y de grado en las universidades públicas para egresados de colegios oficiales y subvencionados.

Los universitarios conquistaron esta ley durante la pandemia de la covid-19 en 2020.

En las inmediaciones del Congreso, en el centro de Asunción, estudiantes marchan bajo la lluvia en defensa de la gratuidad.

Universitarios escuchan la audiencia pública sobre el Arancel Cero donde representantes de las facultades en paro y toma desmintieron las declaraciones del viceministro de Educación Superior Federico Mora.
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Con la eliminación del Fonacide, quedan también sin financiación proyectos como el Fondo para la Excelencia de la Educación, Becal y el Conacyt.