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el extraño caso del ministro que pide moneditas para escuelas

O las tres razones para cambiar los impuestos en Paraguay

A finales de enero, Mario Abdo sonreía en su intervención en el Foro Económico Mundial en Suiza. «Somos casi un paraíso fiscal», decía, intentando seducir con su proyecto país.

Mientras, en Paraguay, el ministro de Educación Petta pedía a la gente por televisión que redondee su vuelto en una cadena de supermercados para comprar pupitres.

El Banco Mundial coincide con el presidente: Paraguay es un lugar con impuestos muy bajos y regulaciones débiles. La presión y la recaudación tributaria del país está entre las más bajas de la región

En teoría esto debe atraer a las empresas. Pero Paraguay sigue penúltimo en Sudamérica en inversión extranjera. La informalidad, el déficit en caminos y la falta de trabajadores calificados definen más a la hora de invertir en el país, según una encuesta a 364 empresarios del Banco Mundial.

Donde Abdo ve una oportunidad, otros ven un problema. ¿Qué razones hay para modificar el sistema tributario?

Razón 1: Porque afecta al bolsillo de los que menos tienen. La mitad del Estado paraguayo se sostiene con el IVA. Lo pagamos todos sin importar cuánto ganemos. Y los más pobres tienen que aportar más en relación a sus ingresos.

A 2013, los que ganaban menos aportaban un 18% de sus ingresos en el IVA. Los que más ganaban, solo el 4,6% de sus ingresos.

Razón 2: Porque se recauda poco. Existe una multitud de deducciones y exenciones tributarias.

Lo que el Estado deja de recibir en impuestos cada año debido a las deducciones es el equivalente a 2 meses de recaudación: 300 millones de dólares. Casi el 75% de ello corresponde a devoluciones de IVA, del que se benefician entre otros, las agroexportadoras.

Y quien tiene más dinero puede evitar pagar impuestos con mayor facilidad. En el caso del IRP, los gastos para deducir el impuesto son los que hacen quienes ganan más: vacaciones, compra de acciones, inversiones inmobiliarias.

Tanto el Banco Mundial como el Fondo Monetario Internacional recomiendan cerrar estos agujeros en la recaudación.

Razón 3: Porque ciertas actividades se deben regular. Una suba al impuesto al tabaco, por ejemplo, no sólo tendría por objetivo recaudar más. También busca desalentar el consumo por su impacto en la salud pública

Actualmente, Paraguay sigue teniendo el impuesto al tabaco más bajo de la región. Mientras, las enfermedades relacionadas al tabaquismo le cuestan 100 millones de dólares cada año al Ministerio de Salud. El cáncer de pulmón es la primera causa de muerte entre los tipos de cáncer y el segundo más diagnosticado en hombres.

Un argumento en contra de reformar y aumentar impuestos es la calidad del gasto público. Mejorar el gasto público es muy importante. Pero no será suficiente para las inversiones que necesita el país.

En Paraguay hay rutas que tienen que seguir haciéndose, hospitales que deben seguir funcionando y salarios de maestras que hay que costear. Una reforma tributaria debe definir quiénes pagarán por todo eso y si se hará de forma justa.

reportaje maxi manzoni · factcheck  jazmín acuña · ilustración robert báez